Los Valores DE LA MONARQUÍA |
Javier Albert Gutiérrez.
Alicante, 13/01/06
Las razones de Las comunidades de seres vivos,
y sobre todo, las humanas, se rigen por argumentos históricos. Roma, llegado un momento
de su desarrollo político, tuvo que recurrir a ella para poder sobrevivir.
Fue obra de dos personas superdotadas, Julio César y Octavio, pero si no hubieran
existido ellos, o hubiesen sido otros o hubiese desaparecido Roma. Sin el
Imperio Romano y Los países más democráticos, avanzados y estables de Europa, América y Asia son aquellos que no han sufrido el trauma de la las revoluciones republicanas, como el Reino Unido, Suecia, Noruega, Dinamarca, Holanda, Bélgica, Luxemburgo, Canadá, Australia, Nueva Zelanda, y Japón. Aquellos países en que las revoluciones republicanas no destruyeron su patrimonio artístico y cultural, es decir, no borraron su memoria histórica. La causa del estancamiento de Latinoamérica está en que surgieron como países tras revoluciones republicanas inspiradas en la francesa. Esto es lo que diferencia a Argentina, México y Venezuela de Canadá, Australia y Nueva Zelanda. España en concreto surgió de la
crisis de Sin El Reino de España, el Estado y la nación más antigua de
Europa, y la civilización Hispánica, no hubieran nacido ni existido sin la
institución de La invasión napoleónica, y los dos breves experimentos republicanos que padecimos, de once meses el primero y de cinco años el segundo, destrozaron el patrimonio histórico y cultural y causaron cientos de miles de muertos. Los responsables de esos nefastos regímenes escaparon con la parte móvil del patrimonio histórico y cultural español, y lo que no pudieron llevarse o no era rentable lo destruyeron. Si a un pueblo se le borra
su memoria histórica, como siempre han hecho las repúblicas, como
en Eso es lo que demuestra Todos los experimentos de ingeniera social pensados por los filósofos y políticos han terminado en el desastre, en el genocidio de millones de personas y en la deshumanización, como les ocurrió a los que sufrieron los Robespierre, Hitler, Stalin y Pol Pot. Y lo mismo les pasará a los que se dejan embaucar por las ensoñaciones fantásticas de los Jomeinis, Ben Laden, Castros y Chávez Por la senda que vamos las nuevas generaciones, educadas
en España, arreada a fustazos por los mohamed, oteguis, ibarreches y rovireches no debe seguir el camino que ha llevado al fracaso de Argentina y Yugoslavia. |